Entrevista a Manuel Hermoso Villalba, presidente de la Confederación de Industrias Extractivas de Rocas y Minerales (Cominroc)


El 70% de la industria europea depende directa o indirectamente de las actividades extractivas, según el Consejo Económico y Social Europeo. La paradoja es que, en España, este tipo de actividades están en el pozo al que las ha arrastrado la crisis de la construcción. Y eso, a pesar de la riqueza que ofrece el territorio.
Conscientes de este panorama, y de que la esperanza está en la colaboración entre empresas, la búsqueda de un hueco en el mercado exterior mientras el propio vuelve a reaccionar y la agilidad administrativa y legal, los empresarios del sector extractivo se han unido en la Confederación de Industrias Extractivas de Rocas y Minerales (Cominroc). Su presidente, Manuel Hermoso Villalba, recuerda que los europeos consumimos al año 3.000 millones de toneladas de materiales de la industria extractiva. La construcción, la industria química, la automovilística, la aeroespacial o la de maquinaria están estrechamente ligados a la industria extractiva.




Manuel Hermoso Villalba-Presidente de Cominroc


¿Cominroc nace para responder a la crisis?

No, no. Cominroc ya era una realidad, aunque no estaba conformada jurídicamente. Lo que existía era Panel Europeo de Industrias Extractivas y ya llevaba funcionando desde hacía algunos años. En Cominroc hay asociaciones muy antiguas, algunas de ellas de hace 30, 40 o 50 años, pero defendían individualmente toda la problemática de acceso a los recursos, de la legislación que sale año tras año condicionada por temas medioambientales y urbanísticos. La legislación ambiental es la misma para una cantera de yeso, que de cal, que áridos, que de piedra ornamental. Otro tema es el de la comercialización, donde Cominroc no entra y sólo demanda políticas que dinamicen la actividad. Hemos integrado a las pymes, junto con empresas de gran tamaño.

Una de las demandas de la entidad es participar en la Comisión de Seguridad Minera como miembro de pleno derecho...

La composición de la Comisión está basada en la minería de antaño, que era la más importante en España, la del carbón y la metálica. Ahora el carbón está en franca regresión y de la metálica quedan tres o cuatro explotaciones en toda España. Las cosas han cambiado, precisamente por el auge de la construcción. Representamos al 98,5% de las explotaciones mineras, el 80,6% del empleo directo y el 82% del volumen de negocio de extracción. Por eso demandamos un representación acorde con el peso específico de la industria extractiva no energética.

No se sienten representados...

Nuestra industria es una industria de futuro, el tema de contaminación es totalmente distinto y no tiene nada que ver lo que es la minería metálica y la minería energética del carbón con la nuestra. En temas de seguridad también es distinto, nuestras explotaciones son a cielo abierto. Por otra parte, la industria del carbón es subvencionada y la nuestra no tiene subvenciones y es rentable.

¿La legislación es suficientemente firme para proteger a empresas y trabajadores?

El sector es pionero en carnés profesionales, es quizás el único que desde hace muchos años tiene carnés de operadores de palas. En cuanto a cursos de formación, muchas veces se llenan. Son cursos de operadores de palas, de maquinaria, de dúmperes e instalaciones. En ese sentido se ha hecho un esfuerzo muy importante.

¿En qué momento se encuentra ahora la industria extractiva?

La industria extractiva no es ajena a la actual crisis que padecemos, que se agrava por su dependencia del sector de la construcción. Se encuentra en un momento difícil por diversas causas: caída muy importante de la demanda, estrangulamiento de capital circulante, aplazamiento de pagos y concursos de acreedores de sus clientes constructores.

Vaya...

En el caso de los áridos, el coste del transporte es muy alto. A partir de 40 km de una explotación cuesta más el transporte que lo que es la materia prima. Al depender de la construcción, estamos en un momento realmente muy complicado.

A partir de 40 km de una explotación de áridos, cuesta más el transporte que la materia prima
¿Cómo se puede hacer frente a la situación?


¿Hacia dónde?

A Estados Unidos, Emiratos, Europa. Incluso ahora creo que están exportando bloques enteros para procesarlos en China, porque el coste de transformación es menor y tienen más calidad los productos nacionales. De hecho, en la Comunidad Valenciana, el núcleo de Novelda (Alicante) creo que es el principal productor de mármol en Europa, por encima incluso de Italia.

La meta de los materiales
El destino principal de los materiales de las extracciones es la construcción propiamente dicha. Pero hay otras aplicaciones en: cerámica y vidrio, fabricación de cemento, siderúrgia, acero, aluminio, revestimientos aislantes, refractarios, abrasivos, industria papelera, plásticos, neumáticos, pinturas, detergentes, industria química, medicina e industria farmacéutica, cosmética, alimentación, piensos, usos agrícolas. En cuanto al medio ambiente, cabe destacar la aplicación en control de procesos erosivos, la regeneración de playas, la restauración de áreas degradadas, la depuración de gases o el tratamiento de aguas y lodos.

“Estados Unidos, Emiratos Árabes y Europa importan mármoles y roca ornamental procedentes de España”
¿Las previsiones son más alentadoras?

No son nada alentadoras. Nos deberíamos retrotraer a los años 90 de consumo y, desde luego, los picos que hemos tenido en los años 2006 y 2005, esos ya están olvidados...Hay una sobrecapacidad de producción realmente elevada.

¿Hasta que punto es importante la colaboración con las administraciones?

Es importante más que nunca que colaboren para reactivar la actividad económica, con políticas de inversión en obra pública y viviendas, fomentando la exportación, adecuando los pagos al cumplimiento de la vigente ley de morosidad, con incentivos fiscales y abaratamiento de costes energéticos, evitando la competencia desleal y simplificando la legislación sectorial.

¿Es posible tener canteras y ser sostenible?

Podemos afirmar con rotundidad que las canteras de la industria extractiva no energética ni metálica son sostenibles, porque en su proceso productivo aplican políticas de seguridad laboral, mejora de la calidad, reciclaje y respeto con el medio ambiente.

Los ciudadanos acostumbran a tener una mala imagen de las canteras...


Si preguntas a la gente qué es un árido, la mayoría te dice que no lo sabe. “Tierra”, dicen. Lo primero que tenemos que hacer es que la sociedad conozca realmente la importancia de la industria extractiva que representamos. Sin ella, ya te digo... no somos los controladores, pero después del agua, los áridos son el producto más consumido por los ciudadanos. Y éstos tienen que ser conscientes de su dependencia y necesidad..

¿Y el impacto en el paisaje?

Sin tener nada contra las energías renovables, va a ser mucho más problemático solucionar los efectos de los parques eólicos. Una urbanización del medio del monte se hará vieja, como ha pasado con el núcleo histórico de muchas poblaciones, y ¿quién la va a restaurar?. La costa que está totalmente degradada, edificios con doscientos mil pisos... El impacto lo tenemos, es cierto. Pero nuestra actividad es temporal, dentro de cincuenta años, nos vamos. Además, cuando nos aprueban el plan de explotación, nos lo aprueban con un plan de restauración. En función de la cantidad de material que vas extrayendo cada año, depositas unos avales y fianzas para cuando te vayas, restaurarlo.

“Va a ser mucho más problemático solucionar los efectos de los parques eólicos”
¿Un buen ejemplo de restauración...?

La gravera Alpuente, en Toledo, que ha recibido un premio europeo de biodiversidad y restauración. Se ha convertido en un espacio húmedo, con biodiversidad de flora y fauna. Por otra parte, en la Federación de Áridos llevamos tres años con una campaña en que un día al año, el mismo para muchas explotaciones de toda España, plantamos árboles. Llevamos 30.000. Participan los niños de los pueblos donde están las explotaciones mineras, para que lo conozcan y sepan el trabajo que estamos haciendo. También tenemos convenios con universidades, donde se dan charlas.

¿Hasta cuándo nos quedan lugares por excavar en España?

España es un país rico en recursos minerales no energéticos, ni metálicos, por lo que la limitación de lugares para extracción de las materias primas de rocas y minerales industriales más que por limitaciones geográficas será por restricciones urbanísticas y medioambientales.


¿De qué o de quién depende que el acceso a las materias primas, tal y como reclaman, tenga un menor coste?

El problema no está en el coste de las materias primas. Realmente el problema es la inseguridad jurídica. Por ejemplo, paradójicamente muchísimas veces un alcalde, en su campaña electoral cierra la cantera. Consigue los votos, y con todas las autorizaciones, pues te la cierran. Luego lo ganarás en los tribunales, después de diez años, pero se han cargado la empresa y ha muerto la actividad. Una actividad con inversiones muy fuertes no puede estar expuesta al vaivén de políticos locales con motivo de elecciones.

Cayó la demanda
*Estimacion de la caída desde los años de máximo consumo (2006-2007) hasta 2010:

  • Áridos: -55%
  • Cemento: -57%
  • Hormigón: -62%
  • Prefabricados: -80%
  • Cerámicos: -75%



¿Qué hay de la burocracia?

En plazos tan largos, con una tramitación que dura cinco o diez años, has presentado un proyecto de acuerdo a unas legislaciones y en el proceso te cambian la legislación, tienes que volver a empezar de nuevo, con unos costes adicionales extraordinarios.

Una actividad con inversiones muy fuertes no puede estar expuesta al vaivén de políticos locales con motivo de elecciones
¿Cómo está el coste de la materia prima?

En áridos, por ejemplo, el producto más caro puede ser la arena, y estamos hablando del orden de 6 o 7 euros por tonelada. La repercusión del árido en una construcción es mínima a nivel económico; lo que sí que tiene repercusión es que si no los hay no se puede construir, son necesarios.




Lo primero que tienen entre manos desde Cominroc...


Ya llevamos tiempo trabajando en, por ejemplo, temas de residuos o una legislación que afecta a la industria extractiva y otras industrias en cuanto a sílice cristalina. Se quieren poner valores de índices de sílice cristalina cuatro veces inferior a lo que es la legislación española e incluso la mitad de lo que está en Europa, sin ningún rigor técnico, con lo cual se crean problemas a todos los sectores industriales.
Tenemos actividad en el Congreso de los Diputados y el Senado, donde hemos intervenido con los máximos responsables de los partidos políticos demandando más actividad sectorial porque tiene un retorno importante para nuestra economía.

Cominroc...
Federación de Áridos (FdA); Asociación de Fabricantes de Cales y Derivados de España (Oficemen); Asociación Nacional de Industrias Extractivas y Afines (Aindex); Federación Española de la Piedra Natural (FDP); Asociación Técnica y Empresarial del Yeso (Atedy). Ibersil (arenas silíceas) ha pedido incorporarse al grupo.
“Podemos afirmar que Cominroc es la voz única del sector extractivo”, explica su presidente.

... y lo que representa

  • Áridos, cales, cementos, minerales industriales, roca ornamental y yesos.
  • Más de 2.000 empresas y 28.000 trabajadores directos representados.
  • 98,4% de las explotaciones españolas
  • 75% de los trabajadores del sector y el 80,8% del valor de la producción minera.





Fuente: Mar Martinez-Interempresas.