Demolición de puentes sin interrupciones con Atlas Copco



En el marco de la renovación de la conexión de la carretera nacional 297 con la carretera nacional 29 en Lorch, la empresa FWA Fischer Weilheim Abbruch GmbH & Co. KG recibió de la Presidencia del Gobierno de Stuttgart el encargo de demoler el antiguo puente de la B297 sobre la B29. El puente de dos tramos de hormigón armado pretensado tenía una masa de 3000 toneladas. En la demolición era imprescindible evitar daños en la carretera nacional que estaba totalmente cerrada al tráfico.
La dificultad en esta demolición residía en que la estructura del puente, además de tener una pendiente longitudinal y transversal, estaba curvada en un radio de 280 metros en la horizontal. Además, ligeramente desplazado, 15 metros por debajo del puente, existía un paso para el tráfico vecinal que debía mantenerse siempre accesible para la entrada de vehículos de salvamento.
Debido a estos condicionantes, fue necesario crear un concepto estático en el que estuviesen determinados de forma detallada todos los pasos de la demolición. El concepto debía asegurar la estabilidad estática durante el derribo, además de impedir en todo momento cualquier peligro para las personas, las máquinas y el medio ambiente.
En primer lugar hubo que realizar un cierre total, seguido del desmontaje de los quitamiedos. A continuación se procedió a proteger la carretera nacional B29 mediante un recoge-escombros hecho de material reciclable. Finalmente, la flota de máquinas Caterpillars compuesta por una excavadora de ruedas y cinco excavadoras de orugas, equipadas con martillos hidráulicos y mordazas demoledoras Atlas Copco, comenzó con la demolición del puente. Ni que decir tiene que en lo que se refiere a implementos hidráulicos, FWA Fischer Weilheim confía exclusivamente en los productos de calidad de la empresa Atlas Copco. Se utilizaron, por ejemplo, un total de cinco martillos hidráulicos de los modelos HB 3000, HB 4200 y HB 7000. Apoyados por mordazas demoledoras de los modelos CC 3300 U, CC 3300 S y CC 6000 U.
Mientras los dos HB 3000 derribaban por arriba el tablero del puente de 30 cm de grosor, las dos mordazas demoledoras CC 3300 U (U= brazo universal), así como la mordaza demoledora CC 6000 U se encargaban del derribo de las vigas marginales. A continuación, se destruyeron las vigas maestras con una sección de cuatro metros cuadrados de hormigón con los dos martillos hidráulicos HB 4200 y el HB 7000. La mordaza demoledora CC 3300 S (S= brazo para chatarra), hizo añicos la armadura pretensada longitudinal de forma que cupiese en los contenedores colocados de forma que pudiera retirarse de inmediato, una vez llenos.
Una vez acabada la primera etapa, la mordaza demoledora CC 6000 U pudo hacer gala de su enorme fuerza y su anchura de boca de 1.400 mm para demoler el contrasoporte. Gracias a la utilización de esta gran mordaza demoledora, la empresa encargada pudo derribar sin mayor esfuerzo los fuertes muros externos de un metro de ancho y su consiguiente armadura. A continuación se volvió a utilizar el martillo hidráulico de 7 toneladas que derribó totalmente, en un tiempo mínimo, el contrasoporte.
Max Bachteler, Jefe de obras de FWA Fischer manifestó que: "Sin los dos equipos de grandes dimensiones CC 6000 U y HB 7000 seguramente no hubiésemos avanzado tan rápido debido al alto grado de material armado". Además, puso por todo lo alto la eficacia de las herramientas hidráulicas Atlas Copco: "Las cinco herramientas hidráulicas funcionaron a toda marcha durante 30 horas, sin fallar ni un minuto". Una vez terminados los trabajos de demolición, el hormigón se trató y rompió in situ en la misma obra, quedando disponible para volver a formar parte de una nueva carretera y así proteger el medio ambiente.
Gracias al trabajo del eficiente equipo de la empresa FWA Fischer Weilheim Abbruch GmbH & Co. KG y a las potentes herramientas de Atlas Copco, fue posible volver a abrir la carretera nacional 29 al tráfico antes de lo planeado