Las obras de desdoblamiento del Eix Transversal en su tramo leridano empezarán este otoño, según confirmaron ayer fuentes del Department de Política Territorial, es incluirán además un acceso directo a la población de Guissona, una de las grandes reivindicaciones de los vecinos de la Segarra desde que se puso en marcha el eje de comunicación.
El proyecto, cuyas obras se empezaron en Manresa a principios de año, prevé desdoblar la actual carretera, que llega a soportar un volumen de tráfico de hasta 12 millones de vehículos al día, con el objetivo de formar una autovía de dos carriles por sentido de circulación.
La nueva autovía, que costará unos 775 millones de euros, estará formada por una calzada de dos carriles de 3,5 metros por sentido, más un carril adicional en los tramos de subida, donde es necesario adaptar la vía para los adelantamientos de los vehículos pesados.
En el tramo leridano, la actuación se divide en dos subtramos: el de Cervera a Les Oluges (de 5,7 kilómetros), que actualmente ya está desdoblado, y el de Les Oluges hasta el límite con la demarcación de Barcelona, donde la nueva calzada seguirá el trazado actual, salvo en algunos puntos concretos.
En lo referente a los enlaces con las poblaciones próximas, el trazado se adaptará a las ya existentes, aunque se contempla como novedad un nuevo desvío para conectar con Guissona, población que hasta ahora carecía de un enlace directo con el Eix Transversal a pesar de su proximidad y de las quejas y reivindicaciones de los vecinos.
19 viaductos
Dada la especial orografía del terreno, en el tramo comprendido entre Les Oluges y Manresa (de 44 kilómetros de longitud) se proyectan 56 estructuras, de las cuales 19 son viaductos.
De estos puentes, 15 corresponden a los cruces sucesivos de la vía sobre la Riera de Rajadell y destaca especialmente uno de ellos, el de Castellar de la Ribera (Solsonès) con una longitud de 150 metros.
Está previsto que las obras en el tramo leridano puedan empezar en el último trimestre de este año, a pesar de que inicialmente se había previsto su puesta en marcha para el pasado mes de abril.
El Eix Transversal (C-55) tiene un recorrido de 155 kiómetros entre Cervera y la N-II en Riudellots de la Selva y vertebra las comunicaciones por carretera entre las comarcas del llano de Lleida, la Catalunya Central y Girona.
Inaugurada hace 10 años, la vía ha ido aumentando progesivament su volumen de tráfico hasta situarse al borde del colapso, ya que 12 millones de vehículos circulan por ella cada día.

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